Un tratamiento estético puede cambiar nuestras vidas al completo. No cabe duda de que nuestro cuerpo puede ser un reflejo de nuestra confianza. Mimarlo y cuidarlo es imprescindible para aumentar nuestra autoestima. La lipoescultura es un tratamiento muy demandado que pretende ayudarnos a conseguir el físico que deseamos, junto al tratamiento de liposucción. A continuación, te explicaremos en qué consisten y las diferencias entre ambos términos.

Moldeando tu cuerpo

Para empezar, debemos saber que la liposucción es una técnica con la que se extrae la grasa sobrante de nuestro organismo, específicamente, la que se encuentra en abdomen, brazos, piernas, cara, cintura, espalda, etc. Se utiliza una tecnología variada para poder eliminarla, ya sea técnicas con ultrasonidos, cánulas, jeringas, entre otras, que permiten la extracción de grasa con éxito. Actualmente, ya empieza a utilizarse cada vez más la tecnología láser para poder disolver grasa en localizaciones más dificultosas y pequeñas, sin tener que recurrir a la succión de la misma.

La lipoescultura es un término que puede confundirse con el anterior. Lo que pretende esta técnica es modelar el cuerpo, perfilando y puliendo las localizaciones deseadas. También, puede intercambiar la localización de la grasa en combinación con un lipofilling, colocando la sobrante en otras zonas y aprovechándose como un relleno. Así, esta técnica es coadyuvante de la liposucción.

Combinando buenos resultados con liposucción

Aproximadamente, en una liposucción, se pueden extraer unos cinco o seis kilogramos como máximo. Puede llegar a abarcar grandes localizaciones de grasa y se realiza en un quirófano preparado y mediante anestesia local.

La liposucción de piernas enteras extraerá la grasa de cartucheras, glúteos, muslos hasta pantorrillas. Es ideal para personas que tienen algo de sobrepeso, especialmente para mujeres que tienden a que se les acumule más en esta localización, debido a los estrógenos. El resultado es muy visible y aportará una armonía a nuestro cuerpo.

La liposucción de papada puede realizarse en cualquier persona, incluyendo las que no padezcan obesidad. Esta técnica puede mejorar el contorno del rostro. Es una operación con posoperatorio muy sencillo. Es recomendable combinar esta operación con otras técnicas que puedan estirar los músculos de cuello y maxilar y, así, perfeccionar al máximo el resultado.

La lipoescultura abarcará zonas más pequeñas, pero, no por ello, será menos eficaz. Con técnica similar a la liposucción, también, puede servir para la papada, así como otras localizaciones menores a “esculpir” como la zona inferior del abdomen. Podemos solicitar que la grasa extraída sirva para el relleno de pómulos, labios u otras localizaciones con otro tratamiento.

Cuando llega un punto que ni la dieta ni el ejercicio físico pueden reducir la grasa corporal más rebelde, la cirugía estética es una buena solución para muchas personas que buscan mejorar su apariencia física. Con la lipoescultura mejoraremos en calidad de vida.