Operaciones estéticas sin cirugía: ¿verdad o mentira?

En toda la historia de la humanidad se han aplicado tipos de intervenciones para recuperar o mantener la estética y belleza de las mujeres, y también de los hombres. En la actualidad las mujeres realizan un 87,8 % de las intervenciones estéticas frente a una 12,2 % de los hombres. Pero ¿sabes realmente la diferencia entre la medicina estética y la cirugía estética?

O más importante, ¿se pueden realizar operaciones de estética sin cirugía y obtener los mismos resultados?

Diferencias entre medicina y cirugía estéticas

La Medicina Estética procura la restauración y promoción de la belleza y la salud, pero con intervenciones más bien pequeñas, es decir, con anestesias tópicas y locales y sin ingreso de sus pacientes.

Los ejemplos más habituales son tratamientos de rejuvenecimiento facial con láser para reducir la papada, los redensificadores cutáneos, la mesoterapia, la radiofrecuencia profunda, o la liposucción asistida por láser.

Todas estas técnicas no requieren de una intervención quirúrgica y tienen un efecto rejuvenecedor mejorando la estética de la persona, pero en absoluto llegan a los resultados de las técnicas quirúrgicas.

Por este motivo, en algunos centros se fomenta su promoción. Los pacientes dejan de escuchar la palabra cirugía y su confianza aumenta a pesar de que los resultados no son los mismos.

Debes saber que la medicina estética propiamente dicha no existe como especialidad médica, simplemente, son médicos generales que realizan este tipo de tratamientos.

La cirugía plástica es una especialidad médica que tiene una vertiente que es la cirugía plástica estética. Esta es la dedicada a la corrección de alteraciones del aspecto estético de los pacientes sin que exista una enfermedad. Su objetivo es obtener una mayor armonía en el rostro, del cuerpo o disminuir el aspecto envejecido por causa de la edad.

Lo que debes saber

Ante una cirugía estética el médico cirujano te realizará un completo estudio con historia clínica, un preoperatorio como en cualquier otra cirugía con analíticas, radiografías, electrocardiograma y fotografías de la zona a intervenir.

Las técnicas

Las más habituales son  la rinoplastia, el levantamiento de cejas, el re-estiramiento de cara y cuello, la lipoescultura, la cirugía de mamas, la blefaroplastia de párpados, las combinaciones de varias de estas técnicas en algunas pacientes, el aumento de barbilla y pómulos o la abdominoplastia.

Lo normal es que el cirujano evalúe tus motivos, ya que la cirugía transforma definitivamente esa parte corporal y no es un mero retoque, por lo que debes estar preparada para el cambio.

drpita